-Jhon, vacílate esto, ¿Me crees si te digo que ver Dragon Ball te hace mejor persona?
-¿De que carrizo me estás hablando? Eso no tiene ningún sentido.
-Bueno, no estés tan seguro. Pilla esto, el doctor Vicente Ramírez del departamento de Didáctica de la Universidad de Cádiz llevó un estudio sobre las personas que vieron Dragon Ball en su infancia y el resultado fue bastante curioso.
Tomó una muestra grande con 3 tipos de personas diferentes. Un tercio del grupo había visto Dragon Ball de niño, otro lo había visto de forma ocasional y el otro grupo nunca lo había visto.
-¿Y qué encontraron? ¿Que a algunos le gustaban más los pelo-pinchos?
-Pues no, encontraron que aquellas personas que lo veían desde pequeño eran personas más amigables, sociables, optimistas y tienen mejores habilidades para resolver problemas emocionales.
-¿Pero cómo si eso es quesi pura pelea y poderes?
-Según el Dr. Vicente la serie tiene una carga importante de valores y que si son integrados de forma correcta en la infancia genera un impacto importante en la vida de la persona. De paso usa referencias de Dragon Ball en sus clases, así que es uno de los profes más cool que existen.
-Bueno, ya escucharon, a los niños hay que ponerles Goku, no Mozart.
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